Como headhunters acostumbramos a encontrarnos candidatos que, después de una larga carrera, se ven fuera del mercado laboral.
En estas situaciones aparece el miedo y la duda de si podremos volver a incorporarnos o no al mercado de trabajo.
Nuestra opinión es que sí, porque sabemos lo que un proverbio alemán tenía muy claro, que “los árboles más viejos dan los frutos más dulces”.
Ahora bien, hay cosas que tendremos que hacer para lograrlo. Se trata de encontrar el sitio en el que podremos aportar valor y, los hay, nosotros no paramos de verlo.
Deberemos identificarlos primero y llegar a ellos con una propuesta concreta. Si lo hacemos, triunfaremos.
Algunos de nuestros consejos en estas situaciones:
1. Serenidad
La novedad genera intranquilidad.
Tenemos una gran experiencia laboral pero que hace mucho que no buscamos trabajo y no sabemos cómo hacerlo, es normal.
Enfocar la situación de forma serena nos aportará el estado de ánimo necesario para hacer las cosas bien.
2. Buscar mi oportunidad
Las oportunidades para los senior no se rigen por los mismos principios de búsqueda que siguen otro tipo de perfiles.
Estas ofertas casi nunca se publican y hay veces en las que las empresas tampoco manifiestan abiertamente que las tienen.
Nuestra red de contactos será muy importante. Todos tenemos red, hay que ponerse a identificar quien nos puede ayudar y en qué espacios debo y puedo participar.
3. Confianza.
Si he tenido éxito en los diferentes proyectos que la vida me ha planteado, ¿porqué no voy a tener éxito es este nuevo reto?
Seguro que sí, sólo tengo que asumir que es un proyecto al que le tendré que poner toda mi energía para llevarlo a buen puerto.
4. Definir mi «Plan Project».
Tendré que hacer mi propio “Plan Project”.
Tener la mente abierta a todas las opciones que me lleven donde quiero ir.
Algunas preguntas me servirán a definir el camino:
- ¿Qué puedo aportar al mercado laboral?
- ¿Dónde en concreto?
- ¿En qué empresas, a qué personas, en qué situaciones, en qué entorno podría yo aportar?
- ¿Quién puede ayudarme a llegar?
- ¿Qué tengo que hacer para llegar?
- ¿Qué pasos y en qué orden debo avanzar?
5. Dedicación y empeño
Una vez claro el camino sólo queda actuar, revisar lo bueno, desechar lo malo, actualizar y no dejar de empeñarse hasta llegar.
Si me empeño terminaré encontrando lo que busco.